Dante y Torcuato Emiliozzi, el binomio de Olavarría, provincia de Buenos Aires, que llegó para enfrentar a los Gálvez, pero también con coches de la marca del óvalo.
EMILIOZZI. Olavarría es la cuna de los otros grandes hermanos del TC, Dante y Torcuato Emiliozzi. Ellos siempre corrieron juntos y con un mismo coche, la cupecita Ford azul y roja, conocida por `La Galera´, porque se mantuvo alta y despegada del suelo, cuando los demás aplicaban técnicas aerodinámicas para `romper´ mejor el aire.
Debutaron en la “Mar y Sierras” de 1950, conduciendo Dante Emiliozzi, con abandono. Decidieron turnarse en esa función y que se fijaría como conductor, al que consiguiera los primeros puntos en una carrera. El 6 de mayo de 1951 Dante Emiliozzi logra llegar tercero en La Pampa y se quedó como piloto. La primera victoria llega en 1953 en Chacabuco. Fueron años de gran dominio y de campeonatos consecutivos. Con ellos, seguía Ford con el predominio marcado por los Gálvez. Sólo que apareció por el 66 Juan Manuel Bordeu, con su célebre coupé «La Coloradita» y quebró la gran sucesión de triunfos. Presionados se pasaron en noviembre de 1969, a un prototipo `Halcón´ de Heriberto Pronello. Se disputaba la Primera Vuelta De Chivilcoy, que fue para Dante su última carrera, al sufrir un grave accidente.